Una de las luchas más duras que se cursa desde el comienzo de la pandemia Covid es la protagonizada por las y los trabajadores de la salud pública, quienes dan contención y prestan sus servicios en condiciones en las cuales ponen riesgo sus propias vidas. Ante el devastador panorama en el cual se sumerge las redes de atención primaria, especialmente en la Región Metropolitana, con un porcentaje de ocupación de camas críticas por sobre el 94%, resulta de suma urgencia atender las necesidades de protección de las y los funcionarios y así reforzar la base del sistema de salud.
El pasado jueves 28 de mayo se realizó una reunión organizada por el Comité Operativo de Emergencia (COE) del Ministerio de Salud (Minsal), la cual tenía por objetivo presentar las cifras de los distintos departamentos técnicos y elaborar planes para proceder en la situación. En esta reunión se entregó un acta, cuya información fue revelada por Ciper, en la cual se registran cifras de contagios dentro del personal de salud que no coincidían con las entregadas por el ministro Jaime Mañalich esa misma jornada.
Durante la mañana de aquél jueves, el ministro informó de 3.707 funcionarios de la salud contagiados, mientras que el acta de la reunión del COE entrega la cifra acumulada desde el inicio de la pandemia hasta el 29 de mayo de 6.840 personas, incluyendo a funcionarios de clínicas privadas, cuya información el ministerio levanta con dificultad.
El reportaje de Ciper expone: «los datos recogidos por la División de Gestión y Desarrollo de las Personas (Digedep) del Minsal, expuestos en la minuta del COE, lo confirman: según su registro se han acumulado 4.882 casos de contagio confirmado entre trabajadores de la salud, solo en el sector público. Si se suman los contagios de personal de la salud en clínicas privadas rastreados por el Minsal, esa cifra se eleva a 6.840 casos positivos, más de un 7% del total de contagios producidos en el país al 29 de mayo.»
De acuerdo con la información levantada por la Digedep, estos contagios han obligado a 7.169 funcionarios de la red pública a permanecer en cuarentena preventiva. De ellos, indica el reporte, 2.444 son técnicos en enfermería, 996 médicos y 995 enfermeros.
En conversación con Resumen, Hernán Cabrera, Dirigente nacional Confederación Fenpruss y coordinador de la octava región, explica que «nosotros representamos a profesionales de las distintas profesiones de los hospitales públicos del país, por lo que dentro de lo que manejamos nosotros estaría quedando un grupo importante que es de atención primaria Municipal representada por Confusam.»
«Hecho el alcance nosotros llevamos un catastro diario dentro de las posibilidades que nos permite nuestro despliegue a nivel país y contamos con un número aproximado de contagiados al 30 de mayo de casi 2 mil funcionarios positivos por covid. La consecuencia de esto es la cantidad de trabajadores que se sacan de funciones para realizar las cuarentenas por haber sido contactos directos de los positivos. Como ejemplo, por un trabajador contagiado, salen en cuarentena equipos completos de un turno y esto por los siguientes 14 días», relata Hernán Cabrera.
Desde Confusam, como atención primaria, han estado coordinando esfuerzos a pesar de la constante actitud excluyente que han denunciado por parte del gobierno para con la salud municipal. Esta red de urgencia está siguiendo la tendencia al alza en las consultas por sintomatología respiratoria y se augura una crisis general para los próximos días.
La organización gremial reveló que hay en la atención primaria 761 trabajadores y trabajadoras contagiadas con Covid. De ellas hay 27 hospitalizadas, 7 de ellos grave. A estos se suman la lamentable cifra de 4 funcionarios fallecidos.
La presidenta de Confusam, Gabriela Flores, anunció en un comunicado el 22 de mayo: «exigimos elementos de protección personal acorde al riesgo de nuestra labor, reforzamiento del recurso humano en toda la red y testeo periódico a todo el personal de salud para la detección precoz de focos de contagio, entre otros factores urgentes para la continuidad de nuestro trabajo».
Hoy en un nuevo comunicado, en respuesta a los polémicos cambios que ha incentivado el Minsal respecto de las cuarentenas preventivas, desde Confusam manifestaron su preocupación frente a esta medida ya que estos «cambios de criterio, que ignoran la evidencia científica y el consejo de los expertos, que indican para personas que sean contactos estrechos asintomáticos, no habiendo completado el período de incubación de la enfermedad, que una cuarentena menor a catorce días no permite dar certezas ni seguridad respecto a su poder de contagiosidad y diseminación en días posteriores».
La principal inquietud que resaltan es que es de conocimiento público la precariedad de elementos de protección personal con el que la Atención Primaria ha abordado la pandemia y que dista mucho de los equipamientos de seguridad con que debieran contar las urgencias de clínicas y hospitales. Por esta razón, mencionan hoy desde el directorio de Confusam, «exigimos a la autoridad la fijación de estándares de protección personal y de seguridad homologados a los que deben existir en los recintos de nivel secundario, ya que de lo contrario expondría a los equipos de la APS a un riesgo mayor que al que diariamente están expuestos y que ya ha cobrado cuatro vidas y provocado la hospitalización de 25 trabajadores/as».
En los Cesfam y Servicios de Urgencia, trabajadores y trabajadoras de la salud se han estado protegiendo del contagio del Covid de acuerdo a sus propios recursos y motivaciones. La mayoría sigue expuestos frente a un virus que avanza implacable. Desde Confusam recalcan una vez más «que de una vez por todas se tomen las medidas necesarias para salvar las vidas de los usuarios/as cautelando la integridad física y psicológica de las y los trabajadores de la Atención Primaria».
Fuente: Resumen