Luego de la noticia emanada en el diario La Segunda, donde se informó que el pasado 18 de mayo, mismo día de las protestas del hambre en El Bosque, La Moneda licitó la compra de productos gourmet de alto precio, la Presidencia de Chile negó todo argumentando que “no se ha adquirido paté de jabalí ni caviar ni ningún producto sofisticado”.
La Moneda salió a desmentir lo informado por el diario La Segunda, que denunció que el pasado 18 de mayo, desde La Moneda se licitó la compra de alimentos gourmet.
La polémica explotó porque ese día quedó marcado como el inicio de las protestas por hambre ante la falta de ayuda gubernamental y que explotaron en la comuna de El Bosque, para trasladarse a otros sectores de la capital en cuarentena.
Ante esta información, Prensa Presidencia de Chile subió un comunicado a su cuenta de Twitter, donde desmintieron totalmente lo informado por el vespertino.
“La licitación a la que se hace referencia responde a requerimientos para la elaboración de menús internos en el palacio de La Moneda y de reemplazo de servicios que históricamente se contrataban a proveedores externos y que eran más caros”, comenzó la misiva.
“Esta licitación tiene por objeto generar ahorros necesarios para el Estado”, argumentan.
A su vez, explican que “no existe obligación del Palacio de La Moneda de hacer pleno uso de dichos recursos. De hecho, no se ha adquirido paté de jabalí, queso ciliegine, mousse de pato, caviar ni ningún producto sofisticado”.
“Los principales ítems adquiridos a la fecha son: quesos, tomates, jamón y mantequilla, destinados mayoritariamente para elaboración de colaciones frías para quienes trabajan en La Moneda, que reemplazaron los platos caliente que se proveían en el casino institucional, antes de la actual pandemia. El gasto promedio de los últimos cuatro meses fue de $4.641.253”, prosiguió.
Finalmente, Presidencia asegura que la información de La Segunda “es incorrecta, puesto que el ‘monto ofertado’ corresponde al listado de precios unitarios licitados a la empresa Demercado, pero no a lo demandado para los servicios alimentarios”.
Fuente: El Desconcierto